El Treepies rufos, pariente cercano del cuervo, parece ser una de las aves con mayor arrojo para afrontar el desafío de la supervivencia de las especies. Y es que sorprendentemente estas aves comen fuego. Mejor dicho, si no encuentran en su hábitat los elementos que conforman su dieta, comen objetos encendidos.
Por supuesto, estos pájaros también comen normalmente frutas, insectos y semillas, como otras aves. Pero comen del fuego o cerca de él, demuestran una increíble adaptabilidad que es digna de la admiración de conservacionistas y ornitólogos. Pero veamos cómo y por qué sucede esto exactamente.
Cómo estas aves comen fuego
En un templo de la India, específicamente en el estado de Gurajat, los fieles suelen encender velas hechas de mantequilla clarificada como parte de sus actos religiosos. Más arriba en los tejados, las atrevidas aves observan esperando al acecho para llevarse las velas encendidas en cuanto tengan oportunidad.
No comerán el fuego literalmente. Pero con valor, llevan la vela encendida en el pico, las apagan con una pequeña y ágil sacudida y se tragan la brasa tan ardiente y humeante como esté. Esta disposición a probar con cosas nuevas para la dieta es un claro indicador de una flexibilidad muy necesaria para la supervivencia de la especie.
Pareja de macho y hembra de urracas vagabunda. Wilkimedia Commons / Charles J Sharp
Otros ejemplos de innovaciones en aves
Este descubrimiento de conducta dio respaldo, además, a anteriores estudios cognitivos donde se hicieron pruebas de habilidades de supervivencia de las aves. Por ejemplo, se han hecho estudios para probar la habilidad de las aves para abrir cajas de comida. Además, se ha observado a cardenales festejando con el néctar de las plantas.
Por otro lado, se ha visto a aves marinas arrojando al agua pedazos de pan como carnada para pescar. Los camachuelos de Barbados también han sido vistos robando paquetes cerrados de comida, llevándolos a sus refugios y allí abriéndolos. Asimismo, los caribes suelen sumergir la comida seca en charcos de agua para poder ablandarla.
Lo interesante para la ciencia es que se trata de comportamientos que requieren deducciones y completar tareas siguiendo pasos. Debido a que Barbados es una región isleña que ha sido desprovista de los hábitats de las aves, tales comportamientos ingeniosos son necesarios para sobrevivir.
El ingenio animal y el riesgo de extinción
En la lucha por la supervivencia, los más capaces de acoger comportamientos nuevos serán los que mejor se adapten bajo condiciones muy exigentes. Y de seguro, son estos los que tendrán más probabilidades de sobrevivir. Claro, dicha flexibilidad no lo es todo para alcanzar la supervivencia. Los animales isleños, los de largos periodos de crecimiento y los de reproducción lenta suelen estar entre los más amenazados.
Esta ave come fuego en una disposición a probar con cosas nuevas para sobrevivir. Crédito: Pixabay
Los motivos de disminución de poblaciones animales y las variables que llevan a las especies a la extinción pueden ser muy complejas. También influyen enormemente la tala, la caza, la reducción de sus hábitats naturales, la sobreexplotación de los recursos que compartimos con otras especies y otros.
Otro problema silencioso que golpea a las especies nativas es la llegada de nuevas especies que compiten por los recursos. Por ejemplo, un desembarco accidental o intencionado de un ave extranjera puede representar la extinción de otra especie autóctona.
El futuro de estas y muchas otras especies
Si estas aves comen fuego, de seguro serán capaces de hacer mucho por su supervivencia. Pero en muchos casos, diversas especies necesitan de la cooperación humana para poder sostener su vida.
La posibilidad de que modifiquen sus hábitos alimenticios no lo es todo para la supervivencia. Es importante que, en la gestión de los recursos naturales, se tome más en cuenta la totalidad de los seres vivos que los utilizan.
Aves comen fuego en un audaz acto de supervivencia
El Treepies rufos, pariente cercano del cuervo, parece ser una de las aves con mayor arrojo para afrontar el desafío de la supervivencia de las especies. Y es que sorprendentemente estas aves comen fuego. Mejor dicho, si no encuentran en su hábitat los elementos que conforman su dieta, comen objetos encendidos.
Por supuesto, estos pájaros también comen normalmente frutas, insectos y semillas, como otras aves. Pero comen del fuego o cerca de él, demuestran una increíble adaptabilidad que es digna de la admiración de conservacionistas y ornitólogos. Pero veamos cómo y por qué sucede esto exactamente.
Cómo estas aves comen fuego
En un templo de la India, específicamente en el estado de Gurajat, los fieles suelen encender velas hechas de mantequilla clarificada como parte de sus actos religiosos. Más arriba en los tejados, las atrevidas aves observan esperando al acecho para llevarse las velas encendidas en cuanto tengan oportunidad.
No comerán el fuego literalmente. Pero con valor, llevan la vela encendida en el pico, las apagan con una pequeña y ágil sacudida y se tragan la brasa tan ardiente y humeante como esté. Esta disposición a probar con cosas nuevas para la dieta es un claro indicador de una flexibilidad muy necesaria para la supervivencia de la especie.
El Treepies rufos, pariente del cuervo, parece ser una de las aves con mayor arrojo para afrontar el desafío de la supervivencia. Crédito: Pixabay
Otros ejemplos de innovaciones en aves
Este descubrimiento de conducta dio respaldo, además, a anteriores estudios cognitivos donde se hicieron pruebas de habilidades de supervivencia de las aves. Por ejemplo, se han hecho estudios para probar la habilidad de las aves para abrir cajas de comida. Además, se ha observado a cardenales festejando con el néctar de las plantas.
Por otro lado, se ha visto a aves marinas arrojando al agua pedazos de pan como carnada para pescar. Los camachuelos de Barbados también han sido vistos robando paquetes cerrados de comida, llevándolos a sus refugios y allí abriéndolos. Asimismo, los caribes suelen sumergir la comida seca en charcos de agua para poder ablandarla.
Lo interesante para la ciencia es que se trata de comportamientos que requieren deducciones y completar tareas siguiendo pasos. Debido a que Barbados es una región isleña que ha sido desprovista de los hábitats de las aves, tales comportamientos ingeniosos son necesarios para sobrevivir.
El ingenio animal y el riesgo de extinción
En la lucha por la supervivencia, los más capaces de acoger comportamientos nuevos serán los que mejor se adapten bajo condiciones muy exigentes. Y de seguro, son estos los que tendrán más probabilidades de sobrevivir. Claro, dicha flexibilidad no lo es todo para alcanzar la supervivencia. Los animales isleños, los de largos periodos de crecimiento y los de reproducción lenta suelen estar entre los más amenazados.
Un pinzón toro con un paquete de azúcar. Crédito: Louis Lefebvre
Los motivos de disminución de poblaciones animales y las variables que llevan a las especies a la extinción pueden ser muy complejas. También influyen enormemente la tala, la caza, la reducción de sus hábitats naturales, la sobreexplotación de los recursos que compartimos con otras especies y otros.
Otro problema silencioso que golpea a las especies nativas es la llegada de nuevas especies que compiten por los recursos. Por ejemplo, un desembarco accidental o intencionado de un ave extranjera puede representar la extinción de otra especie autóctona.
El futuro de estas y muchas otras especies
Si estas aves comen fuego, de seguro serán capaces de hacer mucho por su supervivencia. Pero en muchos casos, diversas especies necesitan de la cooperación humana para poder sostener su vida.
La posibilidad de que modifiquen sus hábitos alimenticios no lo es todo para la supervivencia. Es importante que, en la gestión de los recursos naturales, se tome más en cuenta la totalidad de los seres vivos que los utilizan.
No debe seguirse ignorando el modo en que se les amenaza de manera constante. Si se sigue destruyendo sistemáticamente sus hábitats naturales, puede ser que esta impresionante adaptabilidad de la urraca vagabunda aún no sea suficiente.
Referencias:
- These Birds Eat Fire, or Close to It, to Live Another Day
https://www.nytimes.com/2020/04/28/science/birds-diets-survival.html
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