El jueves pasado, un sismo de magnitud 6.4 golpeó California cerca de la ciudad de Ridgecrest, a unos 240 kilómetros al noreste de Los Ángeles. El sismo ocurrió a una profundidad de aproximadamente 11 kilómetros.
Al día siguiente a las 8:19 PM hora local, un terremoto de magnitud 7.1 golpeó aproximadamente en la misma área pero a una profundidad mucho menor (solo 0.9 kilómetros). Este fue el terremoto más fuerte en California en los últimos 20 años, y también se sintió en el estado vecino de Nevada y hasta México. Las casas y las carreteras resultaron dañadas, con algunas lesiones de nivel «menor a moderado» pero sin muertes.
Los científicos del Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS, por sus siglas en inglés ) han estimado que hay menos de un 1 por ciento de probabilidad de que una o más de las réplicas sean iguales o más poderosas que el terremoto de magnitud 7.1. Es probable que aproximadamente de 55 a 120 réplicas más altas que la magnitud 3 se sientan cerca de Ridgecrest durante la semana siguiente.
Cuando se publicó el pronóstico durante el fin de semana, el USGS había registrado 359 temblores de magnitud 3 o superior. Cinco de ellos eran más altos que la magnitud 5, que son lo suficientemente poderosos como para dañar edificios e infraestructura.
Updated Aftershock Forecast (7:45 PDT, 7/6/2019): One more aftershock forecast update from the @USGS tonight (note the dropping of the probabilities) for the #RidgecrestEarthquake: https://t.co/kZq47xAnzB pic.twitter.com/H7ykZkAWSb
— Dr. Sara McBride👠 (@DisastrousComms) 7 de julio de 2019
Miles de temblores
Desde el terremoto original, se han registrado casi 5.000 temblores adicionales en el área, y aunque la gran mayoría de ellos solo pueden detectarse con sismómetros, los científicos y los lugareños están atentos a cualquier cosa que pueda ser más grande y más peligrosa. Al final del enjambre sísmico, se podrían registrar seis veces más temblores.
EL USGS escribió en su sitio web:
Nadie puede predecir la hora exacta o el lugar de un terremoto, incluidas las réplicas. Nuestros pronósticos de terremotos nos permiten comprender las posibilidades de tener más terremotos dentro de un período de tiempo determinado en el área afectada. Calculamos este pronóstico de terremotos utilizando un análisis estadístico basado en terremotos pasados».
California se encuentra en muchos sistemas diferentes de fallas, siendo la más grande la falla de San Andrés que se extiende por 1.200 kilómetros w3een todo el estado. Muchos esperan que un terremoto devastador, significativamente más poderoso que el de la semana pasada, eventualmente afecte al estado. Sin embargo, el terremoto del 5 de julio no fue un preludio del Big One ni se relacionó con la falla de San Andrés. En cambio, sucedió en un sistema de fallas diferente y distante.
Fuente: IFL Science
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