Un primer estudio de este tipo ha investigado si los pensamientos suicidas podrían ser sofocados tomando ayahuasca, una infusión de la realidad utilizada en rituales y ritos chamánicos en todo el Amazonas.
Si bien todavía es muy temprano para la investigación, los hallazgos son prometedores. Los investigadores concluyen que la ayahuasca puede «mostrar potencial como una intervención para el suicidio». El estudio completo se publicará pronto en la revista Frontiers in Pharmacology, pero actualmente se puede encontrar en línea un manuscrito provisional del artículo.
La ayahuasca es un líquido marrón amargo elaborado hirviendo las hojas de una planta llamada chacruna (Psychotria viridis) con la vid de ayahuasca (Banisteriopsis caapi). La enredadera de ayahuasca contiene N, N-Dimetiltriptamina (DMT), un químico psicoactivo que se encuentra en muchas plantas y es producido naturalmente por el cuerpo humano. Sin embargo, el DMT generalmente es destruido por enzimas en el intestino. Para superar este obstáculo, se agrega la planta de chacruna, ya que contiene inhibidores que bloquean las enzimas y permiten que el DMT llegue al cerebro, lo que resulta en un profundo viaje psicodélico.
Estos efectos psicodélicos han sido utilizados por los indígenas en América del Sur durante siglos para contactar al mundo espiritual, pero recientemente han captado el interés de las personas que buscan la iluminación espiritual y los efectos terapéuticos. Un creciente cuerpo de investigación académica muestra que la ayahuasca podría usarse junto con otros tratamientos para tratar la ansiedad y la depresión. También se muestra realmente prometedor como una herramienta para que las personas superen las adicciones a algunas drogas.
Sin embargo, sus efectos sobre las tendencias suicidas nunca antes se habían evaluado con un ensayo clínico aleatorizado controlado con placebo.
Para el nuevo estudio, un equipo internacional de investigadores dirigido por la Universidad de Ryerson en Canadá le dio a 14 personas con depresión resistente al tratamiento una dosis única de ayahuasca, mientras que otras 15 personas recibieron un placebo. Después de un día, dos días y diecisiete días, se les pidió que informaran cuán suicidas se sintieron usando un cuestionario.
Los investigadores describen sus resultados como «mixtos», pero continúan explicando cómo el estudio muestra que los beneficios terapéuticos de la ayahuasca parecen extenderse a las tendencias suicidas.
Los autores del estudio escriben:
«Dentro del grupo de ayahuasca, encontramos grandes tamaños de efectos para la disminución de las tendencias suicidas en todos los momentos. Además, estos resultados están en línea con investigaciones anteriores que indican que la administración de ayahuasca está asociada con una mejora en los problemas de salud mental asociados con la tendencia suicida».
Como señalan los investigadores, hay algunos inconvenientes en el estudio. Por un lado, es un grupo muy pequeño de participantes y los datos fueron autoinformados. Los efectos terapéuticos percibidos también podrían atribuirse al efecto «resplandor crepuscular» que muchos usuarios experimentan en los días posteriores a un viaje, ya que la investigación siguió a los individuos una semana después.
Sin embargo, como muestra un número creciente de estudios , el vínculo entre la ayahuasca, el bienestar y la salud mental es un campo fértil para futuras investigaciones.
Los investigadores agregaron:
«En general, estos resultados sugieren que los beneficios terapéuticos de la ayahuasca pueden extenderse a las tendencias suicidas y que se justifica la investigación del impacto de la ayahuasca en las tendencias suicidas utilizando una muestra más grande».
Fuente: IFL Science
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